- Saneamiento (convencional, básico, colectivo, individual)
El saneamiento de forma genérica se refiere a todos los procesos relacionados con la eliminación de los desechos producidos por el ser humano o sus actividades asociadas, y está referido más específicamente a la gestión de las aguas residuales, desechos fecales, y a los residuos sólidos. El fin último es que el efecto nocivo de los desechos sea neutralizado, y por tanto no produzca ningún impacto ni en la salud de personas o animales, ni en los ecosistemas o en la calidad ambiental.
Hay múltiples opciones y tipos de sistema que puede ser usados para obtener un procesamiento de los desechos contaminantes que se producen, y que dependerán del tipo de tecnología que pueda ser utilizada por las condiciones, de si es posible implementar sistemas colectivos con redes domiciliares de recolección (alcantarillado), o si se realiza un tratamiento individual por vivienda o grupo de viviendas. Además, el tipo de tratamiento dependerá de si se hace un tratamiento combinado de las aguas grises y las aguas negras, o si se tratan por separado las aguas provenientes del lavado y los desechos de heces y orina.
Tipos de sistemas de saneamiento
Sistemas colectivos: esto está referido a aquellos sistemas que recolectan las aguas de numeras viviendas y los conducen a un sistema centralizado de tratamiento de aguas residuales. En este caso llegan como aguas residuales combinadas, es decir, el agua de lavado (ducha, lavabo, cocina, etc.) con el agua del inodoro (que contiene las heces y la orina).
Sistemas individuales: estos sistemas se focalizan en el tratamiento de las aguas residuales o de los desechos de una vivienda y el sistema de tratamiento está dispuesto en la misma vivienda.
Un caso intermedio son los sistemas colectivos pero que dan cobertura a un número pequeño de viviendas, y que se utiliza de este modo para optimizar costes, pero que no tiene capacidad de proporcionar el saneamiento a grandes núcleos de población.